El cuprífero que forma parte de los diez proyectos más grandes de recursos de cobre a nivel mundial, podría ser hasta cuatro veces más grande que Veladero. En una extensa entrevista, Michael Meding, vicepresidente de McEwen Copper, dijo que “se necesita otro Chile para cubrir las necesidades de cobre a futuro, por lo que El Pachón y Los Azules pueden jugar un papel fundamental”. El ejecutivo considera que el diálogo es muy importante para derribar mitos y quieren “un mejor futuro para todos los calingastinos y los sanjuaninos”.
En un diálogo distendido, “Mike” como prefiere que le digan a quien es el gerente General del Proyecto Los Azules, comentó los avances del cuprífero ubicado en el departamento Calingasta. Lo hizo en el programa radial “Creación Renovable” que se emite todos los sábados de 12 a 14 horas por la CNN Radio San Juan.
-Contamos de tu trayectoria y de tu paso por San Juan…
-Soy de Alemania y hace mucho tiempo estoy viviendo aquí en Latinoamérica. Primero pasé por Chile, donde conocí a mi esposa, y luego nos fuimos tres años a vivir a Buenos Aires. Fue una situación particular porque yo estaba trabajando en laboratorios y consultoría y me dijeron ¨hay un proyecto minero que necesita un gerente¨. Yo en ese momento dije que no, no tenía idea de qué se trataba la minería ni sabía dónde quedaba San Juan. Finalmente envié el currículum a la empresa Barrick Veladero y estuve un día de entrevista y me contrataron. Al principio, yo pensaba que la minería era algo aburrido, estático, que se hace un pozo por 25 años y se tapa el pozo luego de extraer los minerales. Pero entendí que era algo mucho más dinámico, algo más interesante y que también lleva mucha responsabilidad y exposición, sobre todo para el desarrollo del Proyecto y también lo que esta actividad significa para todos los sanjuaninos.
Comencé mi carrera en Veladero, como gerente de Administración y Finanzas, luego de dos años se agregaron también las tareas para el proyecto Pascua Lama, del lado argentino obvio. Entonces tenía la posibilidad de acompañar el crecimiento de Pascua Lama y lamentablemente el cierre temporal del mismo. Luego pude trabajar en la relación estratégica con Shandong Gold, fui parte del equipo que tenía a su cargo extender la vida útil de Veladero buscando socios estratégicos. Luego de esta aventura de siete años en Veladero, trabajé un año como gerente para una empresa de consultoría y luego me fui a Cuba durante unos años. Recientemente me mudé a Canadá y ahí encontré a Rob McEwen, quien era el fundador de Goldcorp, una empresa minera muy grande a nivel mundial y que ahora trabaja como CEO de McEwen Mining. Y esta empresa tiene el proyecto sanjuanino Los Azules. Cuando pude hablar con Rob, le comenté que el proyecto me interesaba mucho, que conocía San Juan y que me gustaría trabajar en ese ámbito. Nos pusimos de acuerdo, y por lo tanto ahora soy vicepresidente para McEwen Copper y el gerente General del Proyecto Los Azules.
-Nosotros somos uno de los top ten de proyectos de cobre sin desarrollar medidos en recursos, otro proyecto a ese nivel es Pachón. Es decir que, de los diez proyectos más grandes de recursos de cobre a nivel mundial, San Juan tiene dos. Creo que eso es un muy buen mensaje para la provincia. En relación con nosotros, a la mitad del año pasado se creó McEwen Copper, porque McEwen tiene algunas minas en Estados Unidos, México y Canadá, pero son más pequeñas y medianas, y Los Azules es un gigante. Entonces se creó esta división y ahora la intención es obtener los recursos necesarios para obtener financiamiento. Estamos en estudios preliminares, recuerdo que en 2017 se hizo uno, y eso es lo que estamos actualizando con más perforación, con más información. Intentamos sacar riesgos del proyecto y vamos a intentar culminar esto antes de fin de año. El próximo año queremos ir público con la empresa y vendrán las etapas de prefactibilidad y factibilidad.
-Se estima que el tamaño del proyecto y el valor es significativamente mayor a lo que se describió en el PEA inicial ¿Esto es así?
-Si, es así. Nosotros hemos hecho algunos estudios y vemos que el proyecto en 2017, que evaluamos con un cobre a 3,25 era muy bueno. Es un proyecto muy interesante con una vida útil de casi 40 años y ahora estamos trabajando para tener más información geológica, más perforaciones y comenzamos a ver que el proyecto podría ser mucho más grande de lo pensado hasta el momento.
-¿Cuál es el tamaño de Los Azules en relación con lo que conoce el sanjuanino de la minería a gran escala?
-En la actualidad estamos pensando que el proyecto, dependiendo de cómo hagamos la explotación y en términos de equipamiento, entendemos que podría ser entre 2 y 4 veces el tamaño de Veladero, y quiero que se entienda que Veladero es una mina muy grande a nivel internacional. Estamos en una situación única, Argentina tiene varios minerales que se necesitan para la transición a la energía verde que es el cobre y el litio y para nosotros, viviendo acá en San Juan, es una chance muy grande de beneficiarnos, pero aportando a esta transición energética. Para el año 2030, el 50% de los autos que se van a producir van a ser eléctricos y para eso se necesita anualmente 5 millones de toneladas de cobre. Esto es más o menos lo que produce Chile, es decir que se necesita otro Chile para cubrir las necesidades de cobre a futuro, por eso es que Pachón y Los Azules pueden jugar un papel fundamental muy importante en esto.
-Desde hace tiempo se habla de materializar Los Azules, ¿de cuánto tiempo estamos hablando para ver concretado el Proyecto?
-Para poder financiar un proyecto de esta magnitud estamos hablando de cifras de 2.4 billones de dólares a fecha de 2017, hoy podríamos estar hablando de 3.5 billones. Es una cantidad muy importante y tenemos que darles seguridad a los inversionistas. Tenemos que dar tranquilidad de que la inversión en Argentina es un buen negocio para realizar. Mi mensaje es que se puede, luego hay que sacar el riesgo del proyecto, es decir que debemos tener más información sobre el recurso y también decidir cuál es el negocio que queremos hacer. Si hablamos en términos de tiempo, este año (2022) vamos a actualizar el Estudio Preliminar Económico, que es la base que usamos para ir luego al mercado y a la compañía. Luego se necesitan entre 12 a 18 meses para realizar un estudio de prefactibilidad y ahí lo que se hace es definir la idea del proyecto. Por ejemplo, si se van a usar camiones eléctricos o a base de diésel, si se usa sistema de lixiviación o flotación, etc. Y un estudio de factibilidad es un estudio mucho más en detalle, que se realizaría un año y medio o dos años más. Finalmente se presenta el pedido de permiso ambiental y luego la ingeniería de detalle.
-Rob es un minero no tradicional, es una persona que quiere caminar caminos poco caminados, en su momento él se encontró con un desafío muy importante, le faltaban recursos para financiar la empresa, entonces tomó toda la información confidencial de la empresa y lo hizo público, e hizo una competencia poniendo un US$ 1 millón para aquel que ayudara a encontrar las próximas 8 millones de onzas de oro de la compañía. Se presentó mucha gente, que accedió a la información confidencial, y a través de esta idea se capitalizó mucho la empresa. Algo similar quiere hacer Rob con relación al cuidado del agua en San Juan. Quiere escuchar al mundo, él cree que las mejores ideas siempre están en la gente.
– ¿Cuáles son los planes de exploración de la campaña que viene, cómo les fue en ésta que termina, y también comentanos sobre las dos áreas pedidas al IPEEM y del nuevo camino de acceso al Proyecto?
-Tenemos planificado en este momento para el estudio preliminar usar la información que vamos a obtener a junio, queremos ampliar la temporada. Pensábamos perforar hasta fines de abril, ahora estamos en mayo y seguimos perforando y trabajando. Tenemos nueve perforadoras en este momento, siete a base de diamantina que es con la cual se sacan los testigos de la montaña para poder ver qué mineralización tiene. Tenemos bastante gente trabajando, aproximadamente 250 personas, 78 propias y el resto contratistas. Hemos cumplido 10.000 metros de perforación y nos ha costado bastante, porque Argentina durante mucho tiempo no tuvo mucha exploración, a lo que se suma el buen valor actual de los metales y lo que está pasando en países como Perú y Chile que, de repente, se pusieron mucho más complejos que diez años atrás. Entonces, Argentina se puso mucho más atractiva para los inversionistas, entonces no hay suficientes equipos, no hay gente, por eso nos costó.
Luego de la pausa que hagamos durante el invierno, retomaremos en primavera y queremos de octubre de 2022 a marzo de 2023, perforar en total 59.000 metros en total para llegar a la prefactibilidad, de los cuales, como comenté, hemos llegado a 10.000 metros. En relación con las nuevas áreas solicitadas al IPEEM podemos decir que siempre estamos intentando hacer más grande el proyecto, son zonas para el norte y el sur que nos interesa. Mucho más que esa información no puedo brindar hasta el momento.
– ¿Los Azules es un proyecto binacional que está amparado en un Tratado de Integración realizado con Chile?
-Si, la Ley de complementación e implementación entre Chile y Argentina se prevé en este Tratado la facilitación y el trabajo entre los dos países para alentar los proyectos mineros en la zona, porque dichas zonas son complicadas en materia de legislación. La pregunta es si vamos a usar el Protocolo y el Tratado, esto dependerá de la infraestructura que logremos en Argentina, porque la situación en este país ha cambiado mucho. Hemos estado reunidos con autoridades de la compañía, con autoridades del EPRE, de EPSE, y vemos que la energía podría resolverse si la provincia se vincula a la provincia de La Rioja en el norte. Y, además, San Juan es una provincia que invierte mucho en energía renovable y es eso a lo que apunta la compañía: realizar una mina diferente, mucho más enfocado a la huella de carbono y el cuidado del medio ambiente.
-Yo creo que sí, porque el proyecto ahora está enteramente en Argentina, en la provincia de San Juan. Nosotros tenemos ahora dos caminos transitables a Los Azules, uno que llamamos camino de exploración que pasa por dos cuestas a 4.200 metros de altura, que es bastante complejo en invierno. Por eso descubrimos el camino sur, que pasa en su máxima altura a 3.400 metros y es ancho y súper transitable, lo inspeccionamos personalmente con Rob y gente de la compañía, de esta manera tendríamos acceso al proyecto durante todo el año y no solo durante la temporada.
-Tenés un español muy fluido ¿esto te ha permitido un acercamiento mayor con las comunidades a lo largo de tu experiencia dentro de la minería?
-Si creo que ningún proyecto se puede llevar a cabo sin tener una buena relación con la comunidad. Desde la gente que tiene menos posibilidades hasta un intendente, uno siempre debe tener buenas relaciones. Nosotros queremos que el departamento de Calingasta se desarrolle, tenemos una relación cercana con la Municipalidad, con el intendente y queremos impulsar proyectos de salud, de educación y de seguridad. No tenemos los mismos recursos que una empresa que ya está explotando, pero queremos un mejor futuro para todos los calingastinos y los sanjuaninos.
– ¿Qué encontraste en San Juan y porqué decidiste quedarte aquí?
-Lo que a mí me gusta de San Juan es que es un lugar para formar una familia. Yo me mudé con mi primera hija que tenía un año y encontramos muchos amigos desde que llegamos. Luego dos de mis hijas nacieron acá, y si les preguntas a ellas te van a decir que son argentinas. Eso habla de lo atractivo que tiene San Juan para llevar la familia. La gente de acá a veces subestima la calidad de vida que se encuentra acá, los controles ambientales son buenos y estrictos, siempre que hablo con antimineros los invito a visitar los proyectos, que viajen y vean. Se van a dar cuenta que uno no se cae muerto, que hay accidentes e incidentes, siempre existe, pero se trabaja para mejorar y San Juan es una provincia que lo maneja muy bien.
-Tu perfil en redes es muy activo, sos muy abierto con los sanjuaninos y eso marca una diferencia en alguien a cargo de un proyecto minero…
-Creo que el contacto con la gente es fundamental, hoy en día todos tienen celular, cámaras, videos, fotos etc. Creo que cada trabajador de la minería es un embajador de la actividad frente a su familia, a sus amigos y la comunidad. Entonces, el diálogo es muy importante para derribar mitos, por eso me encanta cuando hablamos en el grupo de WhatsApp con el personal de toda la empresa y yo les comento, e interactuamos todo el tiempo. Y esta política abierta de comunicación con el personal, con la comunidad y con todos los sanjuaninos está avalada por el CEO de la compañía.