Autoridades del Ministerio de Minería formaron parte del quinto encuentro de la Mesa del Agua, organismo creado para paliar las consecuencias de la crisis hídrica que atraviesa la provincia mediante el desarrollo de un plan integral de gestión del recurso.
Del mismo participaron el ministro de Minería, Carlos Astudillo, el ministro de Producción y Desarrollo Económico, Ariel Lucero; el ministro de Obras y Servicios Públicos, Julio Ortiz Andino; la directora de Evaluación Ambiental Minera, Laura Assandri; el presidente de OSSE, Juan Carlos Caparrós; el director de Hidráulica, Oscar Coria, y el secretario de Agricultura, Ganadería y Agroindustria, Martín Gómez Sabatié, entre otros.
El ministro Astudillo compartió con los presentes una serie de gráficos mediante los cuales explicó cuál es el lugar que representa la minería dentro de la economía provincial. San Juan lidera el ranking nacional de inversiones en exploraciones mineras. El año pasado, la provincia representó un 42% del total, mientras que este año se proyecta que ese porcentaje alcance el 55%, según datos de las cámaras mineras del país.
Además, expuso el porcentaje de incidencia que tienen los proveedores locales tanto en los proyectos El Pachón como en Veladero, dando a conocer así el gran retorno que dicha participación implica para la provincia.
“Uno de los desafíos al que se enfrenta la provincia frente a las distintas empresas que realizan exploraciones en San Juan, se encuentra vinculado a lograr que la participación de mano de obra y proveedores locales en los proyectos sea mayor. Se trata de lograr que contraten empresas sanjuaninas y desarrollen tecnología local, permitiendo una mejor distribución de las riquezas que la minería deja”, explicó el titular de la cartera minera.
De esta forma, dicha redistribución de la renta permitiría realizar aportes significativos para el desarrollo de tecnologías, infraestructura y alternativas que permitan mejorar el aprovechamiento del agua, ya sea mediante la implementación de nuevas redes de riego, la recuperación de canales, la instalación de redes de agua potable y las perforaciones de pozos.
Por otro lado, mostró un cuadro que representaba en números las inversiones que el sector minero lleva realizadas en los departamentos de Calingasta, Jáchal e Iglesia. En el caso de Jáchal, estos fondos fueron destinados a terminar obras de infraestructura sobre canales de riego. En Calingasta se encuentra en desarrollo un sistema que permite llevar el agua potable de los pozos a las cañerías de los habitantes. Muchas de las inversiones que realiza la minería se encuentran vinculadas al sector agroproductivo.
Respecto a los controles y monitoreos de agua que se llevan adelante desde la cartera minera, Astudillo explicó que durante el año pasado, la Secretaría de Gestión Ambiental y Control Minero efectivizó más de 500 controles en todos los puntos de la provincia de San Juan. Se han incorporado, además, monitoreos participativos donde se invita a miembros de la comunidad para que participen, en una muestra de democratización y transparencia del proceso.
El horizonte de la minería en San Juan se encuentra en un proceso de ampliación permanente, por lo tanto el objetivo es mejorar los procesos de control y de impacto de la actividad sobre el recurso hídrico. Para ello, el Ministerio de Minería trabaja junto a la Secretaría del Agua y a las empresas para colocar aforadores de agua. Esto permitirá conocer concretamente cuánta agua hay, por ejemplo, en el río San Juan.
“Necesitamos saber realmente cuánta agua hay y cuál es su calidad. Para ello, los aportes vendrán desde el sector minero”, enfatizó Astudillo. Además, agregó que “actualmente tenemos la responsabilidad de estudiar, junto al INA CRAS, las cuencas subterráneas en las zonas de Calingasta y la Cordillera”. Lo que esta articulación pretende, es el desarrollo de una línea de base de zonas sobre las que no se dispone de información precisa.
Como conclusión, el Ministro de Minería explicó que el sector minero no sólo es uno de los que menos agua consume para el desarrollo de su actividad, sino que además es uno de los que más aporta a la economía y al desarrollo de la provincia. “Es por eso que desde la minería debemos contribuir para colaborar con un mejor San Juan. Todos empujamos hacia el mismo objetivo: conocer las características de nuestra agua de ríos y cuencas subterráneas, y hacer el uso más eficiente posible de la misma”, finalizó.